Tres generaciones creciendo con DeLaval

Aunque David Areán se confiesa un amante de la vida en el campo, tenía claro que, para incorporarse a la ganadería familiar, primero sería necesario que el negocio pasase por un proceso de robotización. De esta manera, hace cuatro años que esta granja instaló dos unidades del DeLaval VMS™ V300, además de empezar a emplear el sistema Cow Cooling de la marca y de adquirir el DeLaval OptiDuo™ y una nodriza CF500. Más en Vaca Pinta 47.

CASA DAS PEDRAS

Localización: Parada (Lalín, Pontevedra)

Propietarios: David Areán Méndez, Evaristo José Areán Fernández y Carmen Méndez Currás

Vacas en ordeño: 120

Media de producción: 42,5  litros/vaca/día

Porcentaje de grasa: 3,70 %

Porcentaje de proteína: 3,30 %

Recuento celular: <100.000 céls./ml

Casa das Pedras es una ganadería lalinense que lleva tres generaciones confiando en los productos y servicios de DeLaval: su relación con la marca se remonta a los años ochenta. Por ello, Marcos Lorenzo, socio de Leiva y Lorenzo (distribuidores de DeLaval en Pontevedra), no exagera al presentarlos como “casi de la familia”. 

Actualmente, esta granja tiene instalados dos robots DeLaval VMS™ V300 con tráfico inverso y con dos puertas inteligentes. Además, en uno de ellos han incluido una puerta separadora. Así mismo, cuentan con el sistema Cow Cooling, con la nodriza CF500 de esta misma casa y con el arrimador de comida DeLaval OptiDuo™.

INCORPORACIÓN CON MEJORAS EN LAS RUTINAS DE TRABAJO

Tras todos los cambios ocurridos en Casa das Pedras en los últimos cuatro años se encuentra David Areán, quien siempre tuvo claro que, si bien tenía intención de continuar con el negocio familiar, para ello sería necesario hacer una apuesta por la robotización en distintas áreas.

“Yo tenía la idea de instalar los robots, el arrimador y la amamantadora”, enfatiza Areán. “Digamos que esa fue mi condición para incorporarme, aunque estar aquí, con mis padres, con mi abuelo, ha sido mi sueño y mi ilusión desde pequeño”, aclara.

Finalmente, se incorporó a finales de 2019, unos meses antes de que se comenzase a implementar la robotización en la granja. Previamente, dedicó varios años a formarse: estudió primero un ciclo medio y después uno superior en el CFEA de Sergude. “Creo que la formación es básica: aprendes distintas formas de trabajar, compartes momentos con gente que tiene tus mismas inquietudes, descubres nuevas posibilidades…”, subraya.

“Aquí la adaptación fue un poco peculiar, porque fue en plena pandemia”, explica el técnico de DeLaval. “En marzo de 2020 decidimos poner ya a funcionar uno de los robots para que David y sus padres empezasen a tener más libertad”. La segunda unidad comenzó a funcionar en mayo de ese mismo año.

La valoración que hacen en Casa das Pedras del servicio técnico es intachable: “Para mí, es perfecto. Durante la instalación fueron eficientes, estuvieron ayudando a ponerlos a funcionar el tiempo que hizo falta, y ahora, si surge cualquier contratiempo, en diez minutos, que es lo que les lleva llegar desde Lalín, están aquí”.

En cuanto a la adaptación de sus padres, cuenta David que “necesitaron algo más de ayuda al principio, pero ahora… ¡que no se los saquen!”. En lo que se refiere al promotor de esta idea, no duda: “Para mí, el cambio fue maravilloso, tienes que hacer tus horas igual, pero estás más relajado y te puedes fijar más en los animales; y para las vacas creo que también fue fantástico. Se acostumbraron muy fácil. A los dos o tres meses estábamos ya cerca de los tres ordeños al día”. Con el cambio de la sala (una espina de pescado de 12 puntos) al robot, consiguieron también un aumento notable de producción: pasaron de una media de 37 litros/vaca/día a rebasar los 42 litros diarios por productora.

El bienestar animal en general también se ha incremento notablemente: “Hace cinco años era impensable que yo estuviera aquí con tres personas desconocidas y ver a los animales así de tranquilos, entrando a ordeñarse como si nada, y mirad ahora”, explica Areán. “Ahora están a su aire las 24 horas del día y se nota cómo ha impactado eso en su tranquilidad”.

ARRIMADOR, NODRIZA Y SISTEMA DE ENFRIAMIENTO

El ordeño no es el único ámbito en el que han querido automatizar tareas en Casa das Pedras. Junto con los DeLaval VMS™ V300, adquirieron el arrimador de comida DeLaval OptiDuo™. “Creo que, teniendo robots, el arrimador es básico, porque los animales tienen el mismo movimiento de día y de noche” –destaca Areán. “Con el OptiDuo™, tienen comida siempre disponible y fresca. Además, creo que la manera que tiene de acercarla, aireándola, funciona muy bien”.

Así mismo, están empleando la nodriza CF500 de DeLaval. En este caso, la razón principal para instalarla fue asegurarse de que los animales ingerían la cantidad necesaria y a la temperatura adecuada. “Se han acostumbrado muy bien, ya no tenemos problemas de diarreas… Es una preocupación menos”.

Pensando en reducir el estrés término de sus animales, disponen también del sistema Cow Cooling de DeLaval. “Fue una recomendación de Marcos y nos funciona muy bien”, valoran estos ganaderos. “Antes, los días fuertes de calor podían hacer que la producción bajase hasta dos litros, además de la repercusión que tienen en los siguientes meses; ahora las bajadas son prácticamente inexistentes”.

AUTOMATIZACIÓN DE TAREAS EN LAS ÁREAS CLAVE DE ESTA GRANJA

• El DeLaval VMS™ V300 incluye un foso que facilita el acceso a la ubre y cuenta con sistema de colocación manual, lo que ayuda a la adaptación de las vacas al robot y permite una mayor facilidad de maniobra para el ganadero.

• El programa de gestión DeLaval DelPro™ da acceso a toda la información de la granja tanto desde el ordenador como desde el teléfono. De esta manera, el uso conjunto de las aplicaciones My Farm™ y DelPro™ Companion nos permite mayor agilidad en la consulta de datos y también poder ejecutar eventos en el entorno de la granja de forma eficiente.

• Con los ventiladores y el Cow Cooling se refresca la zona de los cubículos y la de las cornadizas. Este sistema de refrigeración incluye sensores y aspersores que nebulizan agua sobre los animales, así como un control inteligente que mantiene a las vacas frescas y en movimiento, además de contribuir al ahorro de energía y agua.

• Gracias al DeLaval OptiDuo™, se garantiza que las vacas tengan a disposición durante todo el día comida mezclada, fresca y arrimada.

• El uso de la nodriza CF500 asegura que la recría de la granja ingiere la cantidad de leche requerida y a la temperatura ideal.