Zaira Rodríguez y Fernando Lago están al frente de Casa Eiras, la ganadería familiar que heredó él de sus padres en la localidad coruñesa de O Pino. Las vacas fueron desde siempre la pasión de Fernando y Zaira se decantó por este proyecto porque era lo que realmente la hacía feliz.
En 2015, el coruñés decidió que la robotización de su negocio le ayudaría a llegar a los tres ordeños por vaca, a controlar mejor la salud de sus animales y a lograr una mayor calidad de vida tanto para las vacas como para ellos mismos.
Tras los dos primeros años de ordeño robotizado, la granja continuó en crecimiento y Fernando se dio cuenta de que debía trabajar con dos cabinas de ordeño. En este momento se enamoró de los robots GEA, por su diseño y las facilidades de trabajo que aportaba al ganadero. El foso y la colocación manual para gestiones puntuales fueron clave para llevar a cabo el cambio.
Junto a su empleado, Pablo Midón, cuidan actualmente de un total de 150 vacas productoras, con las que están alcanzando producciones de 40 kg diarios por animal y unos 400 ordeños por día entre las dos cabinas.
Contentos con los resultados, el pvróximo paso que darán de manera inminente es la puesta en marcha del tercer robot GEA DairyRobot R9500. Lo contamos en Vaca Pinta 41.
Localización:O Pino (A Coruña)
Número total de animales: 318
Vacas en ordeño:150
Media de ordeños: 2,7
Media de producción:40 kg/vaca/día
Porcentaje de grasa: 4,00 %
Porcentaje de proteína:3,50 %
RCS: 180.000 cél./ml
¿Qué sistema de ordeño tenían antes antes de los robots?
Fernando: Antes de robotizar la granja, ordeñábamos con una sala GEA, la sala de toda la vida con la que habían trabajado mis padres.
Fue en 2015 cuando decidí comprar un robot de ordeño. Quería lograr más flexibilidad y también intentaba lograr más de dos ordeños por día con un manejo mejor de los animales. Tenerlos a todos identificados, sobre todo, para los parámetros de salud, me parecía interesante.
¿Cuántos años llevan ordeñando los dos robots GEA?
F: En 2017, es decir, hace seis años más o menos, aposté por incorporar dos Monobox de la marca GEA y hasta la fecha. Estamos muy contentos.
¿Por qué eligieron GEA cuando decidieron crecer y pasar a trabajar con dos unidades de robot?
F: En ese momento, fue como un amor a primera vista. El robot reunía todos los requisitos que buscaba. Me parecía una máquina muy completa, con unas facilidades de trabajo importantes y muy agradable para las propias vacas. En la marca también confiaba, porque ya habíamos trabajado muchos años con la sala de ordeño GEA.
Por último, me convenció el servicio técnico con Tecnor Lalín Maquinaria. Anteriormente, teníamos algo de relación con ellos y ahora, tras estos años de trabajo juntos, creemos que son unos grandes profesionales.
¿Qué características de este modelo valoran más positivamente tanto para las vacas como para su trabajo?
Zaira: Para nosotros este robot tiene un valor añadido respecto a los otros que había en ese momento en el mercado. Al final, lo que queremos es que el trabajo del día a día sea fácil y cómodo para el ganadero y ciertamente este modelo te permite secar a un animal desde el foso, muy importante para nosotros, ordeñar a una novilla que tenga en un momento puntual un edema cuando está recién parida, revisar cualquier vaca durante la visita de un veterinario… Este robot te permite hacer todo esto y no tener que atar a los animales en la cornadiza.
Además, el diseño nos gustó mucho, nos parecía una máquina funcional, compacta, fácil para nosotros y cómoda para las vacas.
¿Cuántas vacas llegaron a ordeñar con los dos robots actuales?
F: Esta temporada rondamos las 150, pero llegamos a ordeñar a unas 154 o 156.
¿Cuántos ordeños han llegado a hacer por box con GEA?
F: Generalmente nos aproximamos a los 400 ordeños al día entre los dos. En nuestro caso, no es complicado llegar a los 200 ordeños por cabina. El pico más grande que conseguimos fueron los 432 ordeños al día.
¿Qué producción diaria obtienen con los dos robots actuales?
F: Nos situamos, más o menos, sobre los 6.000 kg de producción diaria en los dos robots.
Ordeñan animales de raza holstein y jersey. ¿Por qué se han decidido por vacas con características tan diferentes?
F: Para mí, la reina es la holstein, pero como entregamos leche a una quesería, incorporamos de modo anecdótico a tres jersey por los sólidos que aporta esta raza y ahora mismo estamos ordeñando a unas 15. Las calidades de estos animales llegan tranquilamente a un 5 % de grasa y un 4 % de proteína, y sus producciones son también muy buenas.
¿Qué beneficios les aporta el ordeño con robots?
F: La diferencia más grande es la tranquilidad de los animales y la mejoría en calidad de vida para nosotros. Las salas implican un trabajo mucho más físico, que aquí no existe prácticamente, y no necesitas tanto personal.
Z: Nos permiten interactuar más con las vacas y se pueden incluso acariciar. Antes, sufrían un poco más. Además, a nosotros nos permite descansar algún día, porque una persona sola puede defenderse perfectamente. Es importante que el ganadero pueda conseguir esa calidad de vida y los robots facilitan eso.
¿Tienen algún equipamiento más de GEA?
F: Sí. Tenemos el tanque de frío y a las vacas identificadas con los collares CowScout.
¿Piensan en crecer o instalar más robots?
F: Ahora mismo queremos ir paso a paso, acabar las obras que tenemos empezadas y comenzar a ordeñar con un tercer robot que ya está instalado.
Z: No nos gusta hacer planes a futuro porque nuestra experiencia nos dice que ningún plan se cumple. En este trabajo nos encontramos con muchas trabas burocráticas y con falta de personal. Lo que sí queremos hacer es seguir trabajando con la misma ilusión e intentar que los animales estén cómodos y que las personas que estamos aquí estemos contentas con nuestro día a día. Eses son nuestros planes.
José María Viana
Técnico de Alimentación de Aira en Casa Eiras
“Esta granja está logrando unos rendimientos para ordeño robotizado sobresalientes”
¿Qué rendimientos son los que se consiguen en estos robots de ordeño de Casa Eiras?
Esta granja está logrando unos rendimientos para ordeño robotizado sobresalientes. Estamos hablando de unos 200 ordeños por robot y día, con unas medias de 15 litros por ordeño, unas calidades muy buenas para ser una granja de alta producción y con unas asistencias voluntarias que suponen muy poco trabajo a los operarios de granja.
¿Cuáles son los factores más importantes para conseguir estos rendimientos?
Mi trabajo consiste simplemente en el asesoramiento a nivel de alimentación y manejo alimentario, que es una parte fundamental en las granjas con ordeño robotizado. Tanto Fernando como Zaira aplicaron rápidamente lo que necesitábamos y así están logrando estos buenos resultados. El trabajo al final es de los operarios y mis recomendaciones en este caso siempre han sido muy bien acogidas.
¿Cree que la alimentación es uno de los puntos clave para la circulación de animales en robots de ordeño voluntario?
La alimentación es un punto más, la clave está en el manejo que el ganadero haga de su establo. Estamos en una granja en la que las condiciones de los animales están muy bien cuidadas y, partiendo de esa buena base, sumamos un buen manejo de la alimentación.
¿Podría puntualizarnos algunas características de la ración utilizada?
Es una ración en la que buscamos una base forrajera de calidad a partes iguales de maíz y de hierba. Para el concentrado en el robot estamos en una media de 6 kg. El truco no es si estás en más o en menos sino en estar en lo que debes según los días en leche de la vaca, con unas tablas bien diseñadas y con unos grupos de ordeño bien establecidos.
¿Qué le parecen los resultados de la granja y de la máquina instalada en esta explotación?
Es una granja con ordeño robotizado de las que yo califico de sobresaliente, una granja con una base genética impresionante, de las mejores de España. Solo les queda conseguir la matrícula de honor con base en su meta de crecimiento.
Llegarán próximamente a los 220 animales en ordeño y la granja será un establo muy automatizado, que podrán manejar sin problema dos operarios al día, para así poder tener mucho más tiempo libre, tanto los empleados como los dueños.