Ayer, miércoles, finalizaba el plazo para que las industrias lácteas hicieran efectivas las subidas en el precio de la leche que pagan a los ganaderos. La asociación Agromuralla considera “insuficientes” las mejoras en los contratos ofertadas por las empresas lácteas, por lo que mantienen su apoyo a la convocatoria de una huelga de entregas a nivel estatal promovida por la plataforma de Ganaderos Lácteos Unidos.
El paro se materializaría a nivel estatal, tendría carácter indefinido y comprendería acciones como dejar de enviar la leche a las industrias transformadoras, además de bloquear la circulación de las cisternas. Esta medida de presión “extrema y dolorosa” es la “única alternativa que nos dejan a los ganaderos”, asegura el presidente de la asociación, José Luis Pérez Barreiro. En este sentido, afirman desde el colectivo que mantendrán reuniones con las diferentes organizaciones agrarias y grupos de ganaderos de los principales municipios productores para que “de Galicia no salga ni un solo litro de leche”.
Agromuralla ha mantenido encuentros con las distintas empresas para conocer de primera mano cuál es su postura, constatando que “únicamente están dispuestas a acometer subidas de un céntimo en la mayoría de los casos, algo totalmente insuficiente para paliar la situación actual del sector”, considera.
Los ganaderos reclaman una subida del precio que cobran por la leche que producen que compense el encarecimiento que están sufriendo los piensos, el gasóleo y el precio de la luz. “Nos estamos arruinando y perdiendo dinero todos los meses. La situación que se prevé hacia principios de año, con nuevas subidas anunciadas en los cereales y los fertilizantes hace que no podamos seguir produciendo”, sentencia el presidente de Agromuralla. Asimismo, cargan contra las grandes cadenas de supermercados que controlan el mercado y fijan los costes, y contra las industrias lácteas. “Encarecer al consumidor la cesta de la compra no es la solución si ese incremento no repercute en el productor. En los últimos tiempos los precios subieron en lo lineales de supermercado, pero desconocemos quién lleva la ganancia o cómo se reparten el pastel la industria y la distribución”, dice Pérez.
Afirman que el precio sigue estancado desde hace décadas, mientras los costes de producción no cesan de subir. “Estamos cobrando la leche igual que hace 30 años, antes de que llegara el euro, pero desde entonces los gastos se dispararon. Pedimos algo que es justo, una subida del precio que garantice la viabilidad económica de las explotaciones para poder seguir manteniendo viva la Galicia Rural”, reclama el presidente.
